Después de que se adjudicó el contrato para la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos, bajo la modalidad “llave en mano” a la empresa OAS Ltda, la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) dice que está dispuesta a cambiarlo por uno de riesgo compartido.
“Dados los cuestionamientos al costo del proyecto, quiero reiterarle la propuesta realizada por mi persona, el 2 de diciembre del 2008 en la audiencia pública, de considerar la modificación de la ejecución del contrato ‘llave en mano’ a riesgo compartido”, señala la presidenta de la ABC, Patricia Ballivián, en una nota enviada a Jorge Aguilera, presidente de la comisión de Desarrollo Sostenible de la Cámara de Senadores el 26 de febrero.
El contrato para la construcción de la carretera, que es parte del corredor de integración Bolivia-Brasil se adjudicó a OAS Ltda. el 4 de agosto del 2008. La extensión es de 306 kilómetros y la construcción demandará cuatro años. El proyecto es cuestionado desde distintos ámbitos.
La Razón publicó el lunes que el documento base de contratación de la obra sufrió 22 enmiendas. Si bien para la ABC las modificaciones son “accesorias”, el senador Aguilera consideró que los cambios “atentan a la calidad y el contenido de la obra”.
Según dijo, el precio referencial de 436 millones de dólares era “un secreto” y ése fue un factor para que sólo exista un proponente: la empresa OAS Ltda.
La obra se adjudicó por 415 millones de dólares. La Asociación de Ingenieros Eméritos (Asieme) de Cochabamba denunció las irregularidades en el proceso al Senado e indicó que la construcción no debería costar más de 280 millones. Mientras, la Sociedad de Ingenieros de Bolivia, filial Cochabamba, estimó un sobreprecio de aproximadamente 100 millones de dólares.
De acuerdo con el contrato de adjudicación, el costo de la construcción por kilómetro será de $us 1.356.210, “la más cara en la historia de las construcciones del país, bajo la modalidad llave en mano”, señaló Aguilera.
El parlamentario mostró los datos de obras similares construidas recientemente, parte del mismo corredor. “El costo del kilómetro en el tramo Roboré-El Carmen es de 692.000 dólares y el de El Carmen-Arroyo Concepción, 666.000 dólares”, añadió.
Además, Aguilera sostuvo que entre las 22 enmiendas que se realizaron al Documento Base de Contratación (DBC) están factores que afectan la calidad de la obra. El DBC inicial establecía que la empresa tenía que hacer mantenimiento de la carretera durante cinco años a partir de la entrega. “Con los cambios esto se elimina, y la ABC hará el trabajo. Esto afecta a la calidad”. El domingo, Ramiro Heredia, gerente de Construcción de la ABC, explicó que este ítem fue cambiado por factores “económico financieros que innecesariamente encarecían el costo de la obra”.
El senador indicó que también se eliminó el uso de la carpeta asfáltica, “pero igual se necesita asfalto para el tratamiento superficial, que lo proveerá la ABC”. Según Heredia, se quitó este ítem porque en julio del 2008 el precio del asfalto iba en ascenso y era “una variable muy sensible”.
Aguilera cuestionó que pese a que se hicieron ajustes al DBC, el ente caminero no introdujo un nuevo precio de referencia. Agregó que esa comisión solicitará la intervención de la Contraloría y del Ministerio de Transparencia.
DATOS DE LAS ENMIENDAS
Pavimento • En las enmiendas se cambió el pavimento flexible de concreto asfáltico por tratamiento superficial doble en la calzada y simple en las bermas (espacios que quedan entre el pavimento y la tierra). También se modificó el ancho de las bermas a un metro, lo que, según Aguilera, resta calidad y duración a la obra. Estos detalles son importantes, pues la carretera vinculará a áreas agropecuarias, es decir que por ella circularán vehículos de alto tonelaje.
Mantenimiento • Se elimina el mantenimiento de cinco años. Jorge Aguilera indicó que este ítem es la garantía de la buena ejecución de la obra, pues es “el único factor que garantiza la protección al contratante de los vicios ocultos que podrían existir, fruto de la construcción” y que aparezcan después de la entrega de la obra. Según la Asieme, el incremento en costo por mantenimiento es de $us 2,5 millones. Con este monto, se sobrepasaría el precio referencial del proyecto.
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