Mañana se realizará la entrega definitiva de la carretera pavimentada Huachacalla–Pisiga de 70,84 kilómetros de longitud, obra que demandó una inversión de más de 30 millones de dólares, que garantiza un tránsito seguro, diario y constante de mercancías y personas hacia la región fronteriza con Chile. Este proyecto carretero consolidará el penúltimo tramo de la ruta Pisiga–Oruro, pues resta sólo la vía Toledo–Ancaravi, de 52 kilómetros, aún en construcción
De esta manera, se consolida el segundo ramal occidental del corredor bioceánico, con una extensión de 4.700 kilómetros que unirá Brasil con
Bolivia y Chile, que permitirá el transporte de dos millones de toneladas de carga por año entre el puerto brasileño de Santos, sobre el océano Atlántico, atravesará por Bolivia, hasta llegar a los puertos de Arica e Iquique, en Chile, en las costas del océano Pacífico. La vinculación entre los tres países, facilitará y promoverá el comercio internacional.
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