Empresarios, analistas y exportadores coinciden que nuestro país si bien avanza en la infraestructura vial, en las condiciones en que nos encontramos como país solo beneficiará otros países si el Estado no articula mejores servicios, alienta la exportación y pone dinámica a la economía boliviana.
Esto a propósito de la concreción del tramo carretero Santa Cruz-Puerto Suárez- Brasil, como parte del anhelado proyecto del corredor bioceánico entre Pacífico y Atlántico.
"Cuidado que nos suceda como cuando uno construye una casa bonita no puede poner muebles bonitos y menos disfrutarlos", espetó Willy Rojo, presidente de la Cámara de Exportadores y el IBCE en referencia a que la nueva carretera nace a la luz sin que se haya desarrollado una serie de convenios entre los países vecinos para una provechosa utilización del corredor bioceánico.
"Urge que el Gobierno y el Estado tengan mecanismos para un mejor beneficio de la carretera. Por ejemplo, debería haber una protección para el transporte boliviano. Para ello se necesita hacer gestión para el adecuado uso del manejo logístico de las exportaciones", señaló Rojo.
Obligaciones y beneficios. Por su parte, Julio Roda, presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente, al igual que los productores azucareros del Ingenio Guabirá y Unagro, consideraron positiva la nueva carretera Santa Cruz - Puerto Suárez -Corumbá, a ser inaugurado el próximo 19 de noviembre.
"Hay que ver desde el lado positivo. Para el sector productivo, sobre todo de la soya, sorgo, maíz y azúcar de esta parte del país es de mucho beneficio para Bolivia. Eso nos permitirá extender hacia toda la zona este la frontera agrícola y de ella sacar hacia el atlántico nuestros productos", señaló Roda.
En cambio, Rojo apuntó que los camiones o conductores brasileños no conocen de la topografía de Bolivia, por lo que es necesario crear otros sistemas de interconexión vial de transporte con otros países. "En el caso de Santa Cruz, deberíamos constituir un “puerto seco” encargada de llevar la mercadería de exportación procedente del Brasil con destino a Chile en una operación combinada entre transportistas de ambos países", señaló.
En otro ámbito, los analistas observan el problema de la gasolina y el diésel, ambos productos subvencionados en el país. "No sabemos cómo lo van a vender cuando ingrese un vehículo extranjero. O qué gasolina va cargar ese camión brasileño, ¿la subvencionada?, hay que ver esos aspectos", argumentó Rojo.
Nuevas políticas de servicios. Otros señalan que a lo largo de todo el corredor, en el caso específico de Santa Cruz- Puerto Suárez, tanto las autoridades de los pueblos, municipios y subgobernaciones, deberían ser partícipes de los servicios modernos y adecuados que deben tener cada tramo. Eso conlleva a generar transversalmente la actividad turística.
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